La semifinal del 'Desafío Siglo XXI' se vio sacudida por un hecho sin precedentes: la expulsión de Katiuska Bula, una de las competidoras más fuertes, por violar el acuerdo de confidencialidad del programa. La decisión, anunciada por la presentadora Andrea Serna, generó un fuerte impacto tanto en los participantes como en la audiencia, poniendo de relieve la estricta política del reality frente a las faltas éticas. La expulsión se produjo después de que la producción confirmara que “personas de su entorno más cercano accedieron a información reservada y la divulgaron a cambio de dinero”. Andrea Serna calificó el hecho como una “traición a la confianza” y enfatizó los valores del programa: “En este programa seguimos creyendo en la palabra, en lo que se promete”. La sanción fue inmediata y contundente: Katiuska no solo debió abandonar la competencia, sino que también perdió los 86.610.000 pesos que había acumulado.
Visiblemente afectada, Katiuska asumió las consecuencias.
En sus primeras declaraciones, entre lágrimas, afirmó: “Sé que es mi responsabilidad, aunque no haya sido mi culpa.
Debo asumirlo aunque me duela.
Toca saber en quién confiar”.
Posteriormente, en una entrevista con 'Día a Día', aclaró que fue víctima de una traición por parte de un familiar cercano.
“Alguien cercano a mí, prácticamente familia, me utilizó.
Usó información para su beneficio sin mi consentimiento.
No fui ingenua, fui confiada, y por eso asumo la responsabilidad”, explicó.
Andrea Serna, por su parte, lamentó la situación, reconociendo el potencial de Katiuska como posible ganadora, pero sentenció: “este juego, como la vida misma, se construye sobre la honestidad y los valores que elegimos defender”.