La disputa, marcada por amenazas y acusaciones de difamación en redes sociales, revela las complejidades de las relaciones profesionales en el mundo del entretenimiento digital.

El conflicto se hizo público cuando Ávila denunció haber recibido un mensaje anónimo con una amenaza directa: “Te metiste con una familia que no te tenías que meter, prepárate”.

Inmediatamente, responsabilizó públicamente a García y a su esposa.

La respuesta de García fue una serie de mensajes ofensivos en los que cuestionó la carrera de la artista, hizo referencia a sus hijos e insinuó que ella mantenía relaciones por conveniencia con figuras como Yina Calderón y un productor de ‘La Casa de los Famosos’. Ante la escalada de ataques, la estrategia de ‘La Toxicosteña’ fue contundente: anunció acciones legales por injuria. Emitió un comunicado a través de la firma de abogados Yepes Garcés y Asociados y, posteriormente, reforzó su defensa con la abogada Wendy Herrera, reconocida por llevar casos de alto perfil como los de Betsy Liliana, exesposa de Diomedes Díaz. Herrera confirmó la representación legal de Ávila y su hijo menor, asegurando que su objetivo es la “salvaguarda de los derechos” de la artista.