Horas después, fue puesto en libertad al considerarse que los hechos no ameritaban una detención prolongada.

Sin embargo, la controversia se desató con la respuesta pública del artista.

A través de sus redes sociales, Almighty negó haber sido detenido, publicando un video para desmentir los rumores y afirmando: “Ten cuidado con los medios de comunicación”. Su equipo de trabajo también desmintió que estuviera bajo el efecto de sustancias. Esta reacción generó un choque de narrativas, enfrentando los informes de las autoridades y los videos de la detención con la versión del propio cantante, lo que ha alimentado el debate público sobre el incidente y su manejo mediático.