La participación de Rebeca Castillo, representante de Amazonas en 'Miss Universe Colombia: el reality', ha generado un intenso debate en redes sociales sobre los estereotipos de belleza en los concursos. La candidata ha sido objeto de una ola de críticas y burlas por su apariencia física, lo que la llevó a limitar su presencia en plataformas digitales para proteger su salud mental.\n\nFrente a los ataques, que incluyeron memes y comentarios despectivos, Rebeca Castillo adoptó una postura de resiliencia y empoderamiento. En lugar de dejarse intimidar, utilizó sus propias redes para enviar un mensaje de superación y autoconfianza. En una de sus publicaciones más destacadas, la joven expresó: “El bullying y las críticas no me detuvieron.
Hoy transformo el dolor en fuerza y sueños grandes”.
Con esta declaración, Castillo enmarcó su respuesta no como una defensa, sino como una afirmación de su valor y determinación.
Su estrategia se ha centrado en defender la evolución de los certámenes de belleza hacia escenarios más inclusivos y que visibilicen la diversidad. Ha promovido la idea de que la representación va más allá de las medidas corporales, abriendo un diálogo sobre la verdadera esencia de estos concursos en la actualidad. A pesar de que algunos han intentado reducir su participación a un fenómeno viral, Rebeca ha logrado darle un significado más profundo, utilizando cada aparición pública para reivindicar causas sociales y emocionales. Su respuesta ha sido celebrada por un sector del público y del jurado, que destacan su autenticidad y seguridad, convirtiendo la adversidad en una plataforma para inspirar a otros.
En resumenAnte el ciberacoso por su físico, Rebeca Castillo, Miss Amazonas, respondió con un mensaje de fortaleza, afirmando que transforma el dolor en sueños. Su estrategia se ha enfocado en promover la inclusión y la diversidad en los concursos de belleza, utilizando la controversia como una oportunidad para inspirar y generar un debate constructivo.