En un giro significativo en un caso de alto perfil, el cantante de reguetón Beéle fue reconocido judicialmente como víctima de violencia intrafamiliar por parte de su expareja, Camila Rodríguez. El fallo ha generado un amplio debate sobre la violencia de género y ha reconfigurado la percepción pública del conflicto que se hizo viral en redes sociales. La Comisaría de Familia de la Comuna 16 de Medellín emitió una resolución declarando a Brandon de Jesús López Orozco (nombre de pila de Beéle) como víctima de agresiones físicas, psicológicas, económicas y emocionales durante su relación con Rodríguez. La decisión se basó en pruebas documentales y técnicas, incluyendo un informe psicológico que detalló al menos tres agresiones físicas, así como patrones de manipulación emocional, control financiero, coerción religiosa y ‘gaslighting’.
En contraste, el despacho determinó que no existían elementos probatorios suficientes para acreditar la denuncia que Rodríguez había interpuesto previamente contra el artista.
Como resultado, se dictaron medidas de protección definitivas a favor de Beéle, prohibiendo a su expareja realizar menciones públicas que afecten su intimidad o buen nombre y ordenándole someterse a terapia psicológica para el manejo de impulsos.
Además, se le exhortó a facilitar una comunicación fluida entre el cantante y los hijos que tienen en común. Tras conocerse el fallo, Camila Rodríguez reaccionó en sus redes sociales con un mensaje contundente: “Tiempo al tiempo, esperaré tranquila, sin afán, Dios es bueno… los hijos de Dios nunca quedan en vergüenza, por más dinero que tengan… todo cae por su propio peso”.
En resumenEl fallo a favor de Beéle marca un precedente importante en casos de violencia intrafamiliar, al reconocer legalmente a un hombre como víctima en una disputa que inicialmente se centró en acusaciones de infidelidad en su contra. La decisión judicial no solo valida la versión del artista, sino que también visibiliza que la violencia en el hogar no tiene género, desafiando estereotipos y promoviendo una conversación más amplia sobre el maltrato en las relaciones de pareja.