En un video que circuló ampliamente, se escucha al directivo interrumpir a la mexicana, llamarla “cabeza hueca” y “tonta”, y ordenarle que se callara con frases como “No te di permiso de hablar”.

Ante la agresión verbal, Bosch intentó defenderse, afirmando: “Todas las delegadas, como mujeres, merecemos respeto”.

La situación escaló cuando Itsaragrisil ordenó a seguridad retirarla del lugar, lo que motivó que varias concursantes abandonaran el recinto en señal de apoyo.

El incidente provocó una ola de indignación global.

La organización Miss Universo México condenó los hechos, calificándolos de “inaceptables”. Incluso la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, elogió a Bosch como “un ejemplo”. La organización Miss Universe Colombia también emitió un comunicado respaldando a la mexicana. Ante la presión, la organización internacional limitó la participación de Itsaragrisil en el resto del certamen y anunció medidas legales.

El directivo, por su parte, ofreció una disculpa pública entre lágrimas durante una rueda de prensa, admitiendo que no se sentía bien y que había hablado “muy fuerte por tanta presión”. Este suceso ha puesto en tela de juicio los valores de empoderamiento que promueve el certamen.