El magnate tecnológico Elon Musk generó una nueva polémica al anunciar en sus redes sociales que canceló su suscripción a la plataforma de streaming Netflix. El empresario justificó su decisión argumentando que la compañía promueve contenidos perjudiciales para los menores de edad. En un mensaje que rápidamente se viralizó, Musk afirmó que tomó la decisión por “la salud de los niños”, tras cuestionar duramente una de las producciones de la plataforma. Aunque un artículo menciona la serie “Dead End: Paranormal Park” por tener un personaje trans, otros textos se refieren de manera más general a una producción llamada “Por la salud de tus hijos”.
Según el empresario, este tipo de contenido “adoctrina” y “distorsiona valores familiares”.
“No pienso apoyar a una compañía que promueve contenidos dañinos para los niños”, expresó Musk.
La declaración provocó reacciones divididas: mientras sus seguidores aplaudieron su postura como un acto de coherencia en defensa de la infancia y la libertad de pensamiento, sus críticos lo acusaron de promover la censura y de intentar imponer su visión sobre lo que las familias deben consumir. Este enfrentamiento con Netflix se suma a la larga lista de confrontaciones de Musk con empresas mediáticas y tecnológicas sobre temas como la libertad de expresión y la influencia de las plataformas en la sociedad. Por el momento, Netflix no ha emitido una respuesta oficial a las críticas del dueño de X (antes Twitter).
En resumenLa decisión de Elon Musk de cancelar su suscripción a Netflix, comunicada a través de sus redes sociales, trasciende un acto personal para convertirse en una declaración política. Su acción instaló nuevamente un debate público sobre la responsabilidad de los gigantes del entretenimiento en la formación de valores y el papel de las figuras influyentes en la promoción de boicots culturales.