Dos días después, la ceremonia espiritual reunió a 150 invitados de diversas partes del mundo.

Corrales utilizó sus redes para revelar detalles de sus tres vestidos, describiendo el principal como una “obra maestra que abrazó su figura con encaje francés y delicadas transparencias”. Durante los votos, las palabras de la pareja conmovieron a los asistentes, con Pasquini recordando cómo se enamoró de su sonrisa y Corrales prometiendo que sus brazos seguirían siendo su “lugar favorito”. La cobertura mediática no solo se centró en el romance, sino también en detalles curiosos, como la presencia de su exnovio, el publicista Luis Fernando Pardo, quien asistió con su esposa, confirmando la buena relación que mantienen. La decisión de transmitir momentos clave en plataformas como TikTok permitió a sus seguidores ser partícipes de la celebración, consolidando la boda como un fenómeno mediático que fusionó lo personal con lo público.