Presentado por el CEO de OpenAI, Sam Altman, Atlas se diferencia por eliminar la barra de direcciones convencional y reemplazarla con una interfaz de chat.

Los usuarios pueden hacer preguntas o dar instrucciones en lenguaje natural, y el navegador, impulsado por ChatGPT, interpreta el contexto para buscar información, resumir páginas web o ejecutar tareas complejas.

Una de las características más innovadoras es el “modo agente”, disponible para suscriptores de pago, que permite a la IA realizar acciones en nombre del usuario, como reservar vuelos, llenar formularios o comprar productos en línea. La plataforma también cuenta con una función de “memoria” opcional, que recuerda el historial de navegación para ofrecer respuestas más personalizadas, aunque OpenAI asegura que el usuario mantiene el control total sobre estos datos. El lanzamiento de Atlas, inicialmente para macOS, provocó una caída de más del 3% en las acciones de Alphabet, la empresa matriz de Google, reflejando la preocupación del mercado ante una posible disrupción en el lucrativo negocio de las búsquedas en línea. Con 800 millones de usuarios semanales en ChatGPT, OpenAI tiene una base sólida para impulsar la adopción de su navegador y redefinir la interacción con la web, pasando de un modelo basado en enlaces a uno centrado en la conversación y la automatización.