alcanzó un nuevo máximo histórico en la bolsa, con acciones que cerraron cerca de los US$264 y una capitalización de mercado que se aproxima a los US$4 billones. Este hito bursátil fue impulsado principalmente por el éxito comercial de la nueva serie iPhone 17 y una mejora en la calificación de la compañía por parte de analistas de Wall Street. El repunte de las acciones, que subieron un 3,9% el 20 de octubre, marca una recuperación significativa para la compañía, cuyo valor había caído hasta un 31% en abril de 2025.

El principal catalizador ha sido la fuerte demanda del iPhone 17.

Según un informe de Counterpoint Research, las ventas del nuevo modelo en sus primeros diez días en Estados Unidos y China superaron en un 14% a las del iPhone 16.

Este desempeño llevó a la firma de análisis Loop Capital a elevar su recomendación de “mantener” a “comprar” y aumentar su precio objetivo a US$315.

Otros analistas, como los de Evercore ISI y Melius Research, también expresaron optimismo, señalando que la demanda actual podría ser superior al ciclo de renovación promedio y que Apple está logrando “silenciar a sus críticos”. A pesar del entusiasmo, persisten dudas sobre la elevada valoración de la empresa, que cotiza a más de 32 veces las ganancias estimadas, por encima de su promedio histórico. De hecho, menos del 60% de los analistas recomiendan comprar acciones de Apple, el porcentaje más bajo entre las grandes tecnológicas conocidas como los “Siete Magníficos”. El analista de Jefferies, Edison Lee, mantuvo una postura negativa, advirtiendo que “el impulso de ventas del iPhone 17 continúa enfriándose” y que el entusiasmo por un futuro iPhone plegable está “exagerado”.