La junta directiva de Tesla ha propuesto un ambicioso paquete salarial para su director ejecutivo, Elon Musk, que podría alcanzar el billón de dólares (trillion en inglés), con el objetivo de convertirlo en el primer "billonario" del mundo. Este plan sin precedentes está diseñado para asegurar su permanencia en la compañía durante la próxima década, vinculando la compensación a metas operativas y de valoración de mercado extremadamente altas. El plan, presentado ante el regulador bursátil, establece condiciones rigurosas para que Musk pueda acceder a la totalidad del paquete.
Deberá multiplicar por ocho el valor bursátil de Tesla, llevándolo a 8,5 billones de dólares, y permanecer en la empresa por lo menos diez años. Además, se le exigen hitos operativos como el despliegue comercial de un millón de taxis autónomos y robots humanoides, y multiplicar por más de 24 las ganancias de la compañía. La propuesta surge en un contexto complejo para el magnate, ya que un tribunal de Delaware anuló su anterior paquete de compensación de 2018, valorado en más de 50.000 millones de dólares, por considerarlo injusto para los accionistas. Según la junta directiva, Musk ha amenazado con abandonar la empresa en varias ocasiones, lo que hace de este paquete una medida estratégica para garantizar su liderazgo a largo plazo.
A pesar de las exigencias, el plan no impone restricciones sobre el tiempo que Musk dedique a sus otras empresas como SpaceX o xAI, ni a sus actividades políticas.
En resumenEl paquete salarial propuesto por Tesla para Elon Musk es una estrategia de alto riesgo para asegurar su liderazgo durante la próxima década. Aunque las metas son extraordinariamente ambiciosas, el plan subraya el valor que la junta directiva atribuye a Musk para el futuro de la compañía en vehículos autónomos y robótica, a pesar de las controversias que lo rodean.