El sistema de cámaras estaría compuesto por cuatro lentes: dos traseros, uno frontal en la pantalla externa y otro interno para videollamadas. En cuanto a su construcción, se espera que utilice una carcasa de titanio y una bisagra avanzada diseñada para minimizar la visibilidad del pliegue en el panel, un desafío técnico clave en los dispositivos plegables. El precio se proyecta en un rango premium, entre 1.999 y 2.500 dólares, con una producción inicial limitada de 3 a 5 millones de unidades, posicionándolo como un producto de nicho. Este lanzamiento formaría parte de una estrategia de rediseño a tres años de Apple, que también incluiría un iPhone ultradelgado en 2025 y un modelo con cristal curvo en 2027.