El Sindicato de Empleados Públicos del SENA (Sindesena) ha convocado a un paro nacional intermitente para protestar por lo que consideran graves fallas de gestión, baja ejecución presupuestal y un notable deterioro en la infraestructura de los centros de formación en todo el país. Las movilizaciones, que se han replicado en diversas regionales como Boyacá y Magdalena, buscan exigir soluciones urgentes a problemas que, según el sindicato, están afectando seriamente la calidad de la enseñanza técnica y las condiciones laborales de los trabajadores. En Boyacá, los trabajadores denuncian que el incumplimiento de acuerdos sindicales previos está comprometiendo la calidad educativa. De manera similar, en Magdalena, los instructores y funcionarios se declararon en asambleas permanentes, paralizando las actividades en los centros de formación. Jhon Álvarez, presidente de Sindesena Magdalena, expresó que "los problemas que denunciamos afectan a instructores y trabajadores en todo el país.
Necesitamos garantías claras sobre los acuerdos, mejor infraestructura, recursos adecuados y respeto a los derechos laborales".
Entre las problemáticas específicas se mencionan la designación de directivos sin la experiencia requerida, cambios injustificados en las líneas de formación, obras inconclusas, uso de tecnologías ineficientes y un déficit de personal que sobrecarga a los empleados existentes. El sindicato ha manifestado su preocupación por el debilitamiento de la Escuela Nacional de Instructores, lo que pone en riesgo la cualificación del personal docente y, en última instancia, la formación de miles de aprendices en Colombia.
En resumenEl paro nacional en el SENA evidencia una crisis interna que, según el sindicato, amenaza la calidad de la formación técnica en el país, con reclamos que van desde la mala gestión administrativa y el deterioro de la infraestructura hasta el incumplimiento de acuerdos laborales.