Esta situación ha generado un "desabastecimiento progresivo e incremento sostenido en los precios locales".

La vía Bogotá-Villavicencio es la principal arteria de comunicación no solo para Guaviare, sino también para Meta, Vaupés, Guainía, Caquetá y Vichada, paralizando el comercio y el empleo en una vasta zona del país. Garzón remarcó que la Amazorinoquía "no puede seguir dependiendo de una sola vía" y llamó al Gobierno a dar soluciones definitivas.

En respuesta a la emergencia, el Ministerio de Transporte anunció medidas para mitigar el impacto, como la aplicación de tarifas diferenciales en los peajes del corredor, con descuentos del 50 % para vehículos de carga pesada y del 30 % para vehículos livianos. Adicionalmente, se está evaluando la ampliación a doble calzada de la variante que conecta Bogotá con Villavicencio como una estrategia de contingencia para mejorar la capacidad de tránsito.