Medellín y su área metropolitana presentan una de las tasas más bajas, con un 11,2 %, seguida de Florencia (11,3 %) y Villavicencio (12,4 %). Estos casos contrastan con la situación de otras capitales.
En Ibagué, por ejemplo, aunque la tasa disminuyó un punto porcentual, sigue siendo muy elevada, situándose en 21,3 %.
El caso más preocupante es el de Neiva, donde el desempleo juvenil no solo es alto, sino que además escaló del 14,5 % al 16,5 % en el último año. El economista Camilo Fabián Gómez Segura, analizando la situación en Neiva, señaló que la vulnerabilidad juega un papel fundamental y que “lamentablemente nuestras políticas no están fomentadas en poder mitigar el desempleo juvenil o falta educativa en una población que se debe priorizar”. Esta problemática de los jóvenes que ni estudian ni trabajan, conocidos como 'ninis', afecta a más de 2,7 millones de personas en el país, quienes se ven atrapados por la falta de oportunidades educativas y laborales. La situación evidencia la necesidad de políticas públicas más efectivas y focalizadas para facilitar la transición de los jóvenes de la educación al empleo formal.