Sin embargo, gremios como Andemos, Asopartes y Fenalco han criticado duramente la propuesta.

Andrés Chaves, presidente de Andemos, afirmó que la medida “carece de sustento técnico y económico” y “penaliza el origen de los vehículos”. Por su parte, Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, calificó la propuesta de “absurda”, argumentando que políticas proteccionistas similares en el pasado no lograron consolidar una industria local competitiva. Los gremios coinciden en que el incremento arancelario afectará directamente los precios al consumidor, limitará la oferta, afectará la libre competencia y desincentivará la compra de vehículos nuevos, lo que podría frenar la recuperación que el sector ha mostrado en 2025.