Las proyecciones para el cierre del año reflejan un crecimiento moderado pero con matices. BBVA Research estima que el PIB crecerá un 2,5% en 2025 y un 2,7% en 2026, sostenido por el consumo de los hogares. Por su parte, Bancolombia ajustó su proyección a un 2,6% para 2025, destacando una mejora en el consumo, como lo demuestra el mayor uso de tarjetas de crédito.

El presidente Gustavo Petro se mostró optimista, afirmando que el país atraviesa un “gran despegue económico” ligado a sus reformas sociales y a la transición energética.

Sin embargo, los analistas advierten sobre riesgos estructurales.

La inversión privada sigue siendo una de las principales preocupaciones, mientras que el sector de minas y canteras, que aporta el 22% del recaudo de renta de personas jurídicas, exhibe fuertes caídas. El presidente de ANIF, José Ignacio López, señaló que la reactivación económica ha coincidido con una “caída muy fuerte” en este sector, lo que afecta las cuentas fiscales. Sectores como comercio, transporte, alojamiento y servicios de comida fueron los que más impulsaron la actividad económica, mientras la industria manufacturera también mostró un comportamiento positivo.