Esta coyuntura ha favorecido a las monedas de mercados emergentes. A nivel local, la apreciación del peso también se ha visto apoyada por operaciones de manejo de deuda del Gobierno, que han incrementado la entrada de dólares al país. Paula Chaves, analista de mercados de HFM, señaló que el dólar en Colombia se mueve entre la postura de la FED y el apetito global por el riesgo, concluyendo que la tasa de cambio “podría estar cerca del límite inferior, lo que abre espacio a un rebote técnico hacia los $3.947 en el corto plazo”. A pesar de la noticia de la descertificación de EE. UU. a Colombia en la lucha antidrogas, los analistas coinciden en que el impacto en la divisa ha sido marginal, ya que el mercado considera que la decisión tiene un “tinte político” y no implica sanciones económicas inmediatas.