El Gobierno Nacional ha propuesto, a través de un borrador de decreto, revivir una contribución o sobretasa del 20% en la tarifa de energía eléctrica para varios sectores industriales. La medida busca recaudar entre $1,2 y $1,4 billones anuales para financiar los subsidios de los estratos 1, 2 y 3, pero ha generado un fuerte rechazo de los gremios por su potencial impacto en la competitividad y los costos de producción. La propuesta modificaría el Decreto 2860 de 2013, que exoneraba a la industria del pago de esta contribución creada en 1994.
Con el cambio, solo las industrias manufactureras mantendrían el beneficio, mientras que sectores como el agropecuario, minería, construcción, comunicaciones y servicios públicos volverían a pagar el recargo. El ministro de Minas y Energía, Edwin Palma, aclaró que la medida “no significaría un aumento del 20% en el servicio de energía para los usuarios” en general, sino que busca que las industrias no exentas vuelvan a contribuir a la solidaridad.
Sin embargo, gremios como ANDEG y Fenalco han calificado la propuesta como un “exabrupto” y un “golpe a la competitividad”.
Alejandro Castañeda, presidente de ANDEG, argumentó que el esfuerzo del Gobierno está “mal enfocado”, ya que el problema de fondo es la mala focalización de los subsidios, que según él tienen “errores de inclusión” de hasta el 60%. Los críticos advierten que el incremento en los costos energéticos se trasladará a los precios finales de bienes y servicios, afectando el costo de vida de los colombianos.
En resumenLa propuesta del Gobierno de reintroducir una sobretasa del 20% a la energía para la mayoría de los sectores industriales ha generado una fuerte controversia. Mientras el Ejecutivo defiende la medida como una forma de recaudar fondos para subsidios, los gremios advierten sobre un grave impacto en la competitividad y los costos de producción, argumentando que la solución debería centrarse en mejorar la focalización de los subsidios existentes.