Este plan, atribuido al senador republicano Bernie Moreno, propondría sancionar y judicializar a Petro.

El mandatario colombiano reaccionó calificando el hecho como un “irrespeto brutal al pueblo que me eligió” y anunció el llamado a consultas del embajador Daniel García-Peña. Aunque la Casa Blanca retiró la imagen de sus canales oficiales, el subsecretario de Estado estadounidense, Christopher Landau, minimizó el incidente diciendo que “no se puede creer en todo lo que publican los medios” y criticó a Petro por su retórica.