Por su parte, Rand Paul sostuvo que, aunque Maduro es un dictador, eso no justifica una intervención militar unilateral.

El rechazo de la resolución se produjo en un contexto de alta tensión, con un masivo despliegue naval estadounidense en el Caribe y una serie de ataques letales contra supuestas “narcolanchas”. La administración Trump había informado previamente al Congreso que no podía justificar legalmente un ataque directo a Venezuela en ese momento y que no planeaba incursiones en su territorio, pero la votación mantiene intacta la potestad del presidente para decidir sobre futuras acciones militares en la región.