Por su parte, el presidente Trump ha buscado distanciarse personalmente de Zhao, afirmando en declaraciones que “no conoce” al cofundador de Binance y negando cualquier vínculo directo con él. Esta afirmación parece destinada a mitigar cualquier percepción de un conflicto de intereses o de un favoritismo personal en el otorgamiento del perdón. El caso de Changpeng Zhao y su posterior indulto se enmarcan en una serie de decisiones controvertidas de la administración Trump relacionadas con el sistema de justicia y el uso del poder presidencial para conceder clemencia. La naturaleza del delito por el cual Zhao fue indultado no se especifica en los artículos, pero el hecho de que el perdón haya sido concedido a una figura tan influyente en el sector de las criptomonedas ha llamado la atención de observadores políticos y financieros.