El presidente Trump ha llegado a confirmar que su gobierno se prepara para atacar objetivos en tierra en Venezuela, declarando que “será muy pronto”.

Esta postura beligerante ha sido criticada por expertos de la ONU, quienes la califican como una violación de la soberanía venezolana y del derecho internacional. En medio de la escalada, Nicolás Maduro ha respondido con llamados a la paz, como su mensaje en inglés improvisado “Not crazy war, yes peace”, pero también ha ordenado nuevos ejercicios militares y ha advertido sobre una posible “insurrección armada nacional” ante una intervención. Trump, por su parte, ha afirmado que Maduro le ha ofrecido “de todo” para evitar una confrontación, sugiriendo que el líder venezolano “no quiere meterse con Estados Unidos”.