Durante el encuentro, Zelensky solicitó misiles de largo alcance Tomahawk, pero Trump se mostró reticente, afirmando que su país "también los necesita" y buscando evitar una escalada.

En cambio, Trump propuso que Rusia y Ucrania "detenerse donde están" y anunció una próxima cumbre con el presidente ruso Vladimir Putin en Budapest para avanzar en las negociaciones de paz.

Esta propuesta de alto al fuego ha sido respaldada por líderes de Francia, Alemania, Italia y Hungría, quienes buscan crear condiciones para una "solución diplomática duradera". La estrategia de Trump parece ser una de doble vía: por un lado, presiona a Rusia con la posibilidad de armar a Ucrania, y por otro, abre una línea directa de negociación con el Kremlin. Sin embargo, fuentes internas citadas por Reuters indicaron que la reunión con Zelensky estuvo marcada por la tensión, ya que Trump habría sugerido a Ucrania hacer concesiones territoriales, algo que el líder ucraniano rechazó.