UU. ha comenzado a revocar visas a ciudadanos extranjeros por comentarios considerados inapropiados en redes sociales.

La medida se aplicó a seis personas que se burlaron del asesinato del activista conservador Charlie Kirk, lo que evidencia una creciente vigilancia de la actividad en línea con consecuencias migratorias. La decisión afectó a ciudadanos de Argentina, Brasil, México, Paraguay, Alemania y Sudáfrica, quienes perdieron sus visas tras una revisión de sus publicaciones en línea. El Departamento de Estado justificó la acción afirmando que se aplicará esta medida a cualquier extranjero que “celebre asesinatos” de ciudadanos estadounidenses, independientemente de su estatus migratorio. Esta política fue impulsada por líderes republicanos que solicitaron a las autoridades tomar medidas contra las burlas por el fallecimiento de Kirk, un firme defensor de los principios del presidente Trump. El propio mandatario otorgó de manera póstuma la Medalla Presidencial de la Libertad, el más alto honor civil del país, a Kirk en una ceremonia en la Casa Blanca. La entidad gubernamental publicó capturas de pantalla de los comentarios que llevaron a la revocación de las visas, entre los que se encontraban frases que calificaban al activista como “racista y misógino”. La medida ha generado un debate sobre los límites de la libertad de expresión y las graves repercusiones que la actividad en redes sociales puede tener en el estatus migratorio de una persona, incluso si ya cuenta con una visa válida.