Activistas denuncian que los detenidos son trasladados a prisiones de máxima seguridad y que los agentes de ICE emplean tácticas intimidatorias, como el uso de vehículos sin identificación y helicópteros Black Hawk. Incluso se han reportado casos de niños y ciudadanos estadounidenses siendo sujetados con bridas durante los procedimientos.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha llegado a acusar a Trump de promover una “guerra étnica” contra los latinoamericanos. El clima de miedo es tan palpable que en varias ciudades se han cancelado las celebraciones del Mes de la Herencia Hispana. Aunque estas políticas han contribuido a una caída histórica en los cruces fronterizos ilegales, también han coincidido con la cifra más alta de muertes de migrantes bajo custodia de ICE en 20 años.