Aunque no todas prosperaron, la acción contra YouTube culminó en este acuerdo millonario.

Según los términos del pacto, 22 millones de dólares serán destinados al Trust for the National Mall, un fondo para proyectos en el Mall Nacional de Washington, incluyendo un salón en la Casa Blanca propuesto por Trump.

Los 2,5 millones restantes se distribuirán entre otros demandantes que se unieron a la causa.

Es relevante destacar que, aunque YouTube accedió al pago, la compañía no admitió ninguna responsabilidad legal por la suspensión.

El acuerdo se produce después de que YouTube restaurara el canal de Trump en 2023, devolviéndole la capacidad de publicar contenido tras más de dos años de restricciones. Este desenlace representa un cierre significativo en los enfrentamientos judiciales de Trump con las plataformas digitales y le permite reivindicar su discurso contra la supuesta censura de las Big Tech.