Una de las medidas más polémicas es la imposición de una tarifa de 100.000 dólares para cada nueva solicitud de visa H-1B, un permiso utilizado por empresas para contratar trabajadores extranjeros altamente calificados. La medida, que entró en vigor el 21 de septiembre de 2025, ya enfrenta una demanda por parte de una coalición de trabajadores, que advierte que frenará la innovación y el crecimiento económico. En el ámbito comercial, Trump anunció un arancel del 100 % sobre productos farmacéuticos de marca o patentados, a menos que las empresas construyan sus plantas de fabricación en Estados Unidos. También se aplicarán gravámenes del 25 % a camiones pesados, del 50 % a gabinetes de cocina y del 30 % a muebles tapizados.

La industria cultural también ha sido blanco de estas políticas.

Trump propuso un arancel del 100 % a todas las películas producidas fuera de Estados Unidos, argumentando que otras naciones han "robado" el negocio cinematográfico del país.

"¡Hagamos que América vuelva a ser grande!

", escribió en su red social Truth Social al justificar la medida.

Estas acciones se suman a un gravamen base del 10 % impuesto previamente a casi todas las importaciones, consolidando una estrategia de guerra comercial que reaviva los temores sobre la inflación y el aislamiento económico de Estados Unidos.