Según los términos del acuerdo judicial, YouTube no admite ninguna responsabilidad en la suspensión.

Del monto total, 22 millones de dólares se destinarán al "Trust for the National Mall", un fondo para financiar proyectos en el Mall Nacional de Washington, incluyendo un salón de baile en la Casa Blanca que Trump había propuesto. Los 2,5 millones restantes se repartirán entre otros demandantes que se unieron a la causa.

Este pacto sigue a acuerdos similares con Meta (propietaria de Facebook) y X (antes Twitter).

Aunque el litigio se cierra, el caso subraya la compleja y tensa relación entre las figuras políticas y las plataformas digitales sobre la moderación de contenidos y la libertad de expresión en la era digital.