El pacto establece una nueva estructura de control mayoritariamente estadounidense para disipar las preocupaciones de seguridad nacional. Tras meses de negociaciones y varias prórrogas al plazo de venta, el presidente Donald Trump confirmó que está a punto de firmar una orden ejecutiva que validará el acuerdo. Este contempla que la empresa matriz china, ByteDance, mantenga una participación minoritaria (menor al 20%), mientras que el control operativo y la mayoría de la junta directiva de la nueva entidad recaerán en inversores estadounidenses. Seis de los siete miembros de la junta serán ciudadanos de EE. UU. Empresas como Oracle y Silver Lake figuran como actores clave en la nueva estructura; Oracle se encargará de gestionar los datos de los usuarios y el algoritmo de recomendación, asegurando que la información permanezca bajo jurisdicción norteamericana. Este punto fue crucial, ya que la ley aprobada en 2024 exigía la desvinculación de las operaciones de TikTok de su matriz china para evitar el acceso de Beijing a datos sensibles de usuarios estadounidenses. Aunque inicialmente se barajó la idea de que el gobierno tuviera una “acción de oro” o un asiento en el directorio, el acuerdo final descarta esta opción. Trump, quien ha elogiado el valor de la plataforma, mantuvo una llamada con el presidente chino Xi Jinping para finalizar los detalles, y se espera que se reúnan en Corea del Sur a finales de octubre.