El Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de Estados Unidos ha aprobado por unanimidad una enmienda para utilizar cerca de 4.000 millones de dólares, confiscados a criminales vinculados al régimen de Nicolás Maduro, para la futura reconstrucción democrática de Venezuela. La iniciativa, propuesta por la congresista republicana María Elvira Salazar, busca transformar estos recursos en una herramienta para la transición política en el país sudamericano. La enmienda a la Ley PANA (Prohibiting Operations and Leases with the Illegitimate Authoritarian Regime of Venezuela Act) aún debe superar varias etapas legislativas antes de convertirse en ley.
Los fondos provienen de dinero incautado durante los últimos dos años a funcionarios chavistas, narcotraficantes y otros delincuentes conectados con los gobiernos de Hugo Chávez y Nicolás Maduro.
La congresista Salazar explicó que el objetivo es que, “una vez que el dictador y sus secuaces desaparezcan, será necesario reconstruir ese país tras la destrucción del socialismo”. En su intervención, describió la propuesta como una forma de iniciar una “revolución capitalista en una Venezuela libre”, apoyando a la oposición que, según ella, ganó las elecciones presidenciales de julio. Salazar enfatizó la urgencia de la medida, advirtiendo que sin esta ley, “el dinero está en el limbo y los criminales pueden quedarse con su botín”. La propuesta busca asegurar que los activos recuperados del crimen organizado se reinviertan en beneficio del pueblo venezolano.
En resumenEl Congreso de EE. UU. avanza en una ley para redirigir 4.000 millones de dólares confiscados a redes criminales del chavismo hacia la reconstrucción de una Venezuela democrática. La iniciativa, liderada por la congresista María Elvira Salazar, busca convertir el dinero robado en una herramienta para la libertad y la transición política en el país.