La controversia se intensificó después de que se revelara una investigación criminal del Departamento de Justicia contra Cook por un presunto fraude hipotecario.

La administración Trump ha utilizado esta investigación como justificación para impulsar su destitución.

Cook fue nominada para el cargo por el expresidente Joe Biden en 2022, y su posible salida representa un nuevo capítulo en los esfuerzos de Trump por ejercer una mayor influencia sobre la política monetaria del país. El presidente ya ha manifestado su intención de reemplazar a Cook, impulsando a Stephen Miran, un asesor comercial de la Casa Blanca, como su posible sucesor. La decisión del juez de impedir el despido establece un enfrentamiento directo entre el poder ejecutivo y el judicial sobre la autonomía de la Reserva Federal. Este caso es visto por analistas como un precedente importante, ya que podría sentar las bases sobre la capacidad de un presidente para remover a los gobernadores de la Fed, una institución diseñada para operar sin interferencia política directa y garantizar la estabilidad económica del país.