Su administración, según sus propias palabras, se encuentra en “profundas negociaciones” para poner fin a la guerra.

A través de su red social Truth Social, el mandatario estadounidense presionó públicamente a la organización palestina.

“¡Todo el mundo quiere que esta guerra termine!

Los israelíes han aceptado mis condiciones.

Es hora de que Hamás también las acepte”, escribió.

Trump advirtió sobre las “consecuencias de no aceptar” el acuerdo, calificando su mensaje como su “última advertencia”.

Esta declaración se produce después de que se conociera que el enviado especial de EE.

UU. en Oriente Medio, Steve Witkoff, envió una nueva propuesta a Hamás a través de un activista por la paz israelí. El propio Trump reveló a la prensa en el Despacho Oval que su gobierno está en “negociaciones muy profundas con Hamás”. Según el presidente, el mensaje a la organización fue claro: “Les dijimos: ‘Déjenlos salir a todos ahora mismo. Déjenlos salir a todos, y les irá mucho mejor’”.

Por su parte, informes indican que Hamás se ha mostrado dispuesto a negociar, aunque con condiciones precisas.

La intervención directa de Trump busca acelerar un acuerdo para la liberación de los rehenes israelíes y un alto el fuego en un conflicto que ha dejado decenas de miles de víctimas.