¡CUIDADO!”.

La Casa Blanca difundió un video que muestra el momento del impacto de un misil contra la lancha. El secretario de Defensa, Pete Hegseth, respaldó la veracidad del operativo, declarando: “Definitivamente no es inteligencia artificial.

Lo vi en vivo. Sabíamos exactamente quién estaba en ese barco”.

La acción se justifica como parte de una nueva estrategia para combatir organizaciones criminales transnacionales mediante acciones militares directas, en lugar de los procedimientos de interdicción tradicionales.

Sin embargo, el gobierno venezolano rechazó enérgicamente la versión estadounidense.

El presidente Nicolás Maduro y otros altos funcionarios, como Diosdado Cabello y Freddy Ñáñez, acusaron a Washington de cometer “ejecuciones extrajudiciales” y de fabricar el video del ataque con inteligencia artificial para justificar una agresión. Este incidente marca un punto de inflexión en la política de seguridad estadounidense en la región, optando por el uso de fuerza letal y generando un profundo debate sobre su legalidad y sus implicaciones diplomáticas.