Entre las medidas recientes se encuentra la suspensión de visas humanitarias para palestinos de Gaza y la promoción de centros de detención como el "Depósito de Deportación" en Florida, inspirado en políticas del gobernador Ron DeSantis. Una de las acciones más polémicas ha sido la suspensión de visas humanitarias para palestinos de Gaza, una decisión que, según los artículos, surgió tras publicaciones de Laura Loomer, una influencer aliada de Trump conocida por sus posturas conspirativas. Esta medida ha sido criticada por organizaciones de derechos humanos. En el ámbito legal, la administración Trump ha demandado al estado de Nueva York por una ley que busca proteger a los migrantes, en un esfuerzo por eliminar los frenos que las jurisdicciones locales imponen a las agencias federales. Organizaciones de defensa de migrantes han pedido que la demanda sea desestimada. Además, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) ha implementado nuevas tácticas en los tribunales que toman por sorpresa a los migrantes y sus defensores.
Estas estrategias, calificadas como inéditas, han generado inquietud entre abogados y activistas.
La construcción de un nuevo centro de detención en Florida, apodado "Deportation Depot", se suma a la estrategia de mano dura, siguiendo el modelo de Alligator Alcatraz. Estas políticas se enmarcan en un discurso que busca frenar la inmigración, aunque enfrenta desafíos legales y críticas por parte de gobernadores como Gavin Newsom de California, quien teme que Trump intente frenar normativas estatales de protección a migrantes.