Rubio también acusó a las bandas de narcotraficantes de operar con libertad desde Venezuela, contribuyendo a la desestabilización de Colombia sin que, a su juicio, exista una respuesta efectiva. Las declaraciones del secretario de Estado reflejan la perspectiva de la administración Trump sobre la situación de seguridad en un aliado clave de la región, y se suman a las preocupaciones expresadas por otros funcionarios estadounidenses sobre el rumbo político y la estabilidad institucional en Colombia. La crítica directa al liderazgo del presidente Petro evidencia una relación bilateral que, aunque estratégica, no está exenta de fricciones y cuestionamientos por parte de Washington.