Aunque calificó la discusión como prematura, las declaraciones del mandatario han avivado las especulaciones sobre el futuro del liderazgo del movimiento MAGA.
Consultado por periodistas sobre si Vance era el heredero de su movimiento, Trump respondió: "Bueno, creo que muy probablemente". Añadió que su vicepresidente "está haciendo un gran trabajo" y que "probablemente sería favorecido en este momento". Aunque Trump ha evitado en el pasado inclinarse por un sucesor, esta es la primera vez que da un respaldo tan claro a una figura dentro de su círculo cercano. El presidente también planteó la posibilidad de una fórmula republicana entre Vance y el actual secretario de Estado, Marco Rubio, afirmando que "tal vez podría juntarse con JD de alguna forma". Estas declaraciones se producen en un contexto en el que Trump ha insinuado en varias ocasiones la posibilidad de buscar un tercer mandato, a pesar de las limitaciones constitucionales.
No obstante, en una entrevista reciente, afirmó que "probablemente no" lo haría, aunque le gustaría.
Vance, por su parte, ha indicado que podría ser candidato en 2028, pero solo después de consultarlo con Trump, lo que refuerza la idea de una transición de poder controlada dentro del ala más conservadora del Partido Republicano.












