Sin embargo, videos del interior del bar Before Club, donde se encontraban, no muestran ningún conflicto previo, lo que debilita la versión de los agresores. El padre de la víctima, Jaime Alberto Moreno, expresó su dolor y desconcierto: “Cuando uno ve la cara de satisfacción de haber matar a alguien... uno siente que la vida se le va porque trabajó y cuidó a un ángel y ver que lo arrebatan de esa manera tan vil, tan inhumana pues no tiene sentido”. El proceso judicial ha avanzado con la captura de Suárez y la entrega voluntaria de González. Una jueza, al dictar medida de aseguramiento contra Suárez, destacó la “extrema crueldad” del ataque y la frialdad del acusado, en quien no observó “ningún grado de arrepentimiento”. La familia de la víctima, a través de su abogado Francisco Bernate, ha exigido la captura de Fernández, al considerar que su participación fue determinante en el crimen.