Según el fallo, Narváez instigó al jefe paramilitar Carlos Castaño para cometer el secuestro, entregándole información clasificada obtenida ilegalmente por el DAS.

El Colectivo de Abogados José Alvear Restrepo (Cajar), representante de las víctimas, celebró la sentencia, afirmando que está "plenamente probado que Narváez era asesor de la alta cúpula militar y paramilitar". La condena también incluye una inhabilidad de 20 años para ejercer funciones públicas. La parte más controvertida del fallo es la compulsa de copias a la Fiscalía para investigar a los hermanos Uribe Vélez y al general (r) Carlos Alberto Ospina. La jueza se basó en el testimonio del exparamilitar Francisco Enrique Villalba, quien aseguró haber participado en una reunión en 1997 en la finca "La Marranera", donde presuntamente se planeó "callar" a Valle, Umaña y al periodista Jaime Garzón por sus denuncias sobre violaciones de derechos humanos y la connivencia entre paramilitares y la Fuerza Pública en Antioquia. El expresidente Uribe reaccionó calificando la orden como "una compulsa miserable basada en una declaración fantasiosa, investigada hace años, sobre una reunión inexistente".