Este fenómeno se ha acelerado en Colombia a un ritmo mayor que en países como Japón o Corea del Sur. Como consecuencia directa, ya se observa el cierre masivo de colegios por falta de estudiantes, afectando la infraestructura educativa y el acceso a este derecho en diversas comunidades. A largo plazo, esta tendencia demográfica amenaza la sostenibilidad del sistema de pensiones, la salud pública y la productividad nacional.

Sin embargo, el informe destaca un aspecto positivo: la maternidad adolescente, en el grupo de 15 a 19 años, ha disminuido un 17,2 %.

Esta reducción es vista como una oportunidad para romper ciclos de pobreza y ampliar las posibilidades educativas y laborales de las jóvenes. Las causas de la baja natalidad son multifactoriales, incluyendo la inseguridad económica, la informalidad laboral y las dificultades de acceso a vivienda, lo que condiciona la decisión de tener hijos. Piedad Urdinola, directora del DANE, explicó que este fenómeno es parte de la transición demográfica del país.