Recientes eventos en diversas cárceles del país han puesto de manifiesto estas fallas estructurales. En la Penitenciaría El Bosque de Barranquilla, se generó un escándalo tras la difusión de imágenes de una fiesta con licor, música y celulares en un pabellón donde se encuentran recluidos presuntos miembros de ‘Los Costeños’. Este hecho no solo evidencia la falta de control sobre el ingreso de elementos prohibidos, sino que también revela la existencia de estructuras de poder internas que, según denuncias, imponen cobros ilegales y controlan la vida dentro del penal. Como respuesta, el INPEC realizó operativos de registro, decomisó varios elementos y anunció el traslado de los implicados a cárceles de máxima seguridad, además de iniciar una investigación por posible corrupción de funcionarios. Por otro lado, la crisis sanitaria en la cárcel Modelo de Bucaramanga se agudizó con el cierre del patio 3 debido a un brote de varicela, elevando a cuatro los pabellones restringidos. En un fallo relevante, la Corte Constitucional ordenó al INPEC facilitar el ingreso de médicos particulares a los centros carcelarios sin necesidad de orden judicial, tras evidenciar barreras que vulneran el derecho a la salud de los reclusos. La Corte también exigió al INPEC crear una circular para aclarar los procedimientos de ingreso de abogados, quienes solo deben presentar su cédula, tarjeta profesional y autorización del interno.