Según versiones preliminares, la noche anterior salió a cenar y poco después comunicó a su delegación que se sentía mal, por lo que se dirigió a un centro médico por sus propios medios. La principal hipótesis que manejan las autoridades es que fue víctima de un ataque con escopolamina, lo que le habría provocado dos paros cardíacos.
Los organizadores del certamen aclararon que la joven no se hospedaba en el hotel oficial del concurso. El alcalde de Santa Marta, Carlos Pinedo Cuello, lamentó el suceso y activó un plan de apoyo a la familia a través de la Secretaría de Promoción Social, solicitando celeridad en la investigación. “Hasta tanto no se emita el dictamen de Medicina Legal, reiteramos que cualquier información que circule no puede considerarse oficial”, manifestó el mandatario.
El caso ha reavivado las alarmas sobre la seguridad de la comunidad LGBTIQ+ en la ciudad y ha puesto de relieve la vulnerabilidad de esta población.
Los ataques con escopolamina son una modalidad delictiva común en ciudades turísticas de Colombia, utilizada para someter a las víctimas y robarlas, con consecuencias que pueden ser fatales.