Esta acusación apunta a una grave violación de derechos humanos por parte de agentes del Estado.

En contraste, la Séptima División del Ejército informó que sus tropas sostuvieron enfrentamientos armados con el Clan del Golfo en la vereda El Ceibo, y que la organización criminal utilizó a la comunidad como “escudo humano”. En su comunicado, el Ejército reconoció que, posterior a los combates, “murió una mujer, en circunstancias que son materia de investigación”, y aseguró que facilitó el acceso de la policía judicial para esclarecer los hechos. El Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz) registró el homicidio de Monsalve Tobón como el número 110 de un líder social en Colombia durante 2025, destacando su labor en la defensa de la tierra y la paz territorial. La Defensoría del Pueblo ya había emitido alertas tempranas sobre el riesgo para los líderes en Ituango, una zona con presencia del Clan del Golfo y disidencias del Frente 18.