El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, reveló un detalle escabroso del caso, afirmando que el detenido “tenía en su celular pornografía infantil y abusos de menores también en Medellín”. La investigación que condujo a su captura se derivó del proceso contra Stefan Andrés Correa, otro ciudadano estadounidense condenado a cadena perpetua en Florida en 2025 por explotar a cinco menores colombianas.

Las evidencias de ese caso permitieron a las autoridades identificar un patrón delictivo que los llevó hasta el odontólogo.

El presidente Gustavo Petro confirmó la captura, calificando al detenido como “un explotador sexual de menores en Medellín”. Este caso resalta la grave problemática del turismo sexual y la explotación de menores en la ciudad, así como la importancia de la cooperación judicial internacional para combatir redes criminales que vulneran los derechos de los niños, niñas y adolescentes.