Durante su detención, confesó que le habían pagado 700.000 pesos por cometer el ataque y delató a sus cómplices, quienes lo esperaban en un taxi y también fueron capturados.
El dictamen de Medicina Legal confirmó que la mujer sufrió una incapacidad definitiva de 60 días y quedó con secuelas permanentes en varias partes de su cuerpo. Además de la pena de prisión por el delito de lesiones personales con agentes químicos, los condenados deberán pagar una multa de 666 salarios mínimos legales mensuales vigentes. La sentencia ya se encuentra ejecutoriada, cerrando un capítulo judicial que visibiliza una de las formas más crueles de violencia contra las mujeres.