El Benfica concretó uno de los fichajes más importantes del mercado al asegurar los servicios de Richard Ríos, procedente del Palmeiras. La transferencia se cerró por una cifra que asciende a 27 millones de euros fijos más variables, superando ofertas de otros clubes como la Roma. El club portugués blindó al jugador con un contrato hasta el 30 de junio de 2030 y una cláusula de rescisión de 100 millones de euros, demostrando la alta valoración que tienen sobre su potencial. En su presentación, Ríos expresó su alegría: “Es una alegría enorme para mí y mi familia. Es un paso gigante en mi carrera. Jugar en Europa era un sueño para mí”. El volante de 25 años tuvo un debut prometedor en el amistoso contra el Fenerbahçe de su compatriota Jhon Jader Durán, donde fue titular y participó en la jugada del segundo gol de su equipo. Uno de los momentos más comentados fue su reencuentro con el defensor argentino Nicolás Otamendi. Tras un cruce verbal en un partido de selecciones, el club portugués aprovechó la situación para publicar un video humorístico en el que ambos aparecen con guantes de boxeo, simbolizando que cualquier rivalidad quedó en el pasado. Ríos calificó su debut como “maravilloso” y destacó el cariño con el que fue recibido por el equipo y la afición.
