Tedesco afirmó que el jugador está "motivado para jugar" pero sufre de un dolor persistente que podría originarse en la espalda. Sugirió además que en el pasado, Durán habría sido "obligado a jugar con dolor", por lo que ahora el club procederá con cautela.

"No lo obligaré. No lo haré por el riesgo y el dolor", sentenció el entrenador.

Sin embargo, esta versión contrasta con informes de la prensa turca.

El periodista Umut Eken llegó a afirmar que al colombiano se le diagnosticó una "fractura por estrés bilateral" que podría dejarlo fuera por el resto de la temporada. Por otro lado, el comunicador Volkan Demir relató que, ante resonancias magnéticas que no mostraban lesiones, el propio Durán, aquejado por un "dolor terrible", solicitó ser tratado por un fisioterapeuta en Barcelona, donde recibió inyecciones.

Según esta fuente, el jugador ya estaría entrenando de forma diferenciada y no tendría fracturas. Esta disparidad de informaciones crea un panorama de total incertidumbre sobre el estado real del delantero y su eventual regreso a la competencia.