La Selección Colombia afrontará el crucial duelo ante Bolivia sin dos de sus piezas habituales, el lateral Daniel Muñoz y el mediocampista Kevin Castaño, quienes se encuentran suspendidos por acumulación de tarjetas amarillas. Ambos jugadores, fundamentales en el esquema táctico del entrenador Néstor Lorenzo, recibieron amonestaciones en el partido anterior contra Argentina, lo que automáticamente los inhabilitó para el penúltimo encuentro de las Eliminatorias Sudamericanas. La ausencia de Muñoz, titular indiscutible en el lateral derecho, obliga al cuerpo técnico a buscar un reemplazo entre Santiago Arias y Andrés Felipe Román, quienes, aunque son convocados regularmente, no han tenido la misma continuidad en el proceso. Por su parte, la baja de Kevin Castaño en la zona de contención deja un vacío en el equilibrio defensivo del equipo.
Su rol como recuperador y primer pase ha sido clave, y su reemplazo natural sería Richard Ríos, del Benfica, quien ofrece un perfil con mayor vocación ofensiva.
Estas ausencias forzadas representan un desafío táctico para Lorenzo, quien deberá reconfigurar su once inicial en un partido decisivo para asegurar la clasificación al Mundial 2026. Afortunadamente para el combinado nacional, tanto Muñoz como Castaño habrán cumplido su fecha de sanción y estarán disponibles para el último partido de la clasificatoria, que se disputará como visitante ante Venezuela.
Esta situación pone a prueba la profundidad de la plantilla colombiana en un momento clave.
En resumenLa suspensión de Daniel Muñoz y Kevin Castaño por acumulación de tarjetas amarillas obliga a Néstor Lorenzo a realizar cambios clave en la alineación de Colombia para el partido contra Bolivia. Aunque ambos jugadores regresarán para el último encuentro ante Venezuela, su ausencia pone a prueba las alternativas del equipo en defensa y mediocampo.