Esta situación alimentó rumores sobre la posibilidad de que el delantero hubiera fingido la dolencia para evitar ser convocado por Néstor Lorenzo para los cruciales partidos de eliminatorias. La especulación creció cuando el propio José Mourinho, en conferencia de prensa, fue tajante sobre el estado del colombiano: “Jhon no está en buenas condiciones físicas, tiene problemas y entrena menos”. Esta afirmación no solo confirmó que el atacante no atraviesa su mejor momento, sino que expuso una aparente falta de regularidad en su preparación, comparándolo desfavorablemente con otros jugadores del plantel. La suma de la “insólita lesión”, las dudas sobre su veracidad y las críticas directas de una figura como Mourinho, han colocado a Durán en el ojo del huracán, convirtiéndolo en una baja casi segura para la Selección Colombia y generando incertidumbre sobre su rol en el Fenerbahçe.
