El extremo colombiano, que llega cedido por el Bournemouth hasta junio de 2026, fue recibido con entusiasmo por los hinchas en Belo Horizonte. En sus primeras declaraciones, expresó su felicidad por unirse a "un gran equipo como el Cruzeiro" y aseguró que la conversación con el técnico Leonardo Jardim fue clave para su decisión. Sin embargo, su estado físico es el principal foco de atención.
Medios brasileños como Globo Esporte han hecho un análisis detallado de su situación, calificando la temporada 2024/25 como "la peor del jugador colombiano" debido a las lesiones.
Sufrió dos recaídas en el tendón de la corva que lo limitaron a solo 14 partidos con el Bournemouth, llegando a Brasil con cinco meses de inactividad oficial. El propio Sinisterra reconoció que, aunque se siente bien físicamente, le "falta un poco de ritmo de competencia", pero espera estar listo "lo más pronto posible". Esta situación plantea un desafío para Cruzeiro, que ha fichado a un jugador de gran talento pero con un historial reciente que genera dudas sobre su disponibilidad a corto y mediano plazo.